FAVICIN
EPIRRUBICINA
Solución inyectable
1 Caja , 1 Frasco(s) ámpula , 10 mg
1 Caja , 1 Frasco(s) ámpula , 50 mg
FORMA FARMACÉUTICA Y FORMULACIÓN:
Cada frasco ámpula con liofilizado contiene:
Clorhidrato de epirubicina |
10 mg y 50 mg |
Excipiente, c.s. |
1 frasco |
INDICACIONES TERAPÉUTICAS: FAVICINMR, está indicado como antineoplásico en carcinomas de ovario, mama, estómago, esófago, hígado (carcinoma hepatocelular primario), páncreas, de cabeza y cuello.
La epirubicina se ha utilizado con resultados terapéuticos aceptables en casos de sarcoma óseo y de tejidos blandos, linfoma no Hodgkin y enfermedad de Hodgkin, leucemias agudas y mieloma múltiple.
FARMACOCINÉTICA Y FARMACODINAMIA EN HUMANOS: La epirubicina es un antibiótico antraciclínico con actividad antineoplásica cuyo mecanismo de acción citotóxico no se ha dilucidado por completo. Una vez que penetra en las células y llega al núcleo, forma un complejo con el DNA por intercalación de sus anillos planares entre los pares de bases de nucleótidos. Esto trae consigo la inhibición de los ácidos nucleicos (DNA y RNA) y de la síntesis de proteínas.
La intercalación desencadena la fragmentación del DNA por la topoisomerasa II que origina alteraciones importantes en la estructura terciaria del DNA. La epirubicina, al igual que la doxorubicina, posiblemente intervenga en reacciones de oxidación-reducción que generan radicales libres muy reactivos y tóxicos. Es posible que mediante todos estos mecanismos la epirubicina despliegue su actividad antiproliferativa y citotóxica.
La epirubicina no se absorbe en el tubo digestivo y suele administrarse vía intravenosa, aunque también se ha administrado por vía intravesical. Luego de su administración intravenosa, el medicamento se distribuye rápida y ampliamente en los tejidos corporales y se metaboliza en el hígado, formándose epirubicinol y cantidades detectables de derivados de glucurónidos. Su vida media de distribución es muy rápida y su volumen de distribución en estado estacionario sobrepasa 40 L/kg. El fármaco no cruza la barrera hematoencefálica en cantidades detectables y se desconoce si se distribuye hacia la leche materna.
La epirubicina es eliminada principalmente por la bilis, con una vida media de eliminación plasmática de 30 a 40 horas. Alrededor de 10% de la dosis se recupera en la orina en un término de 48 horas.
CONTRAINDICACIONES: No se utilizará este fármaco en pacientes con hipersensibilidad a la epirubicina, a antraciclinas o antracenedionas. El empleo de epirubicina por vía intravenosa está contraindicado en casos de mielosupresión persistente o estomatitis grave por tratamientos citotóxicos previos, infecciones generalizadas o en enfermos con disfunción hepática grave, arritmias presentes o preexistentes. Este medicamento no se usará en caso de insuficiencia cardiaca o infarto miocárdico previo, ni tampoco durante el embarazo y la lactancia.
PRECAUCIONES O RESTRICCIONES DE USO DURANTE EL EMBARAZO O LA LACTANCIA: La epirubicina puede ser dañina para el feto. A las mujeres con posibilidad de embarazarse mientras reciben tratamiento con este fármaco se les advertirá sobre este riesgo potencial y se les aconsejará que eviten el embarazo durante el tratamiento.
La epirubicina tiene potencial mutágeno y puede ocasionar daño cromosómico en los espermatozoides humanos; los hombres que reciban tratamiento con FAVICINMR deberán aplicar medidas anticonceptivas.
La epirubicina es secretada en la leche materna. A las mujeres tratadas con FAVICINMR se les indicará que opten por otro método de alimentación de sus lactantes para prevenirles cualquier daño.
REACCIONES SECUNDARIAS Y ADVERSAS: El tratamiento con FAVICINMR puede acompañarse, con mayor o menor frecuencia, de los siguientes efectos tóxicos y reacciones adversas:
Sistema cardiovascular: Taquicardia sinusal, anormalidades electrocardiográficas (cambios no específicos en el segmento ST-T), taquiarritmias, extrasístoles ventriculares, taquicardia ventricular, bradicardia, bloqueo de rama. También puede presentarse miocardiopatía tardía (dos o tres meses después del tratamiento o hasta varios años después de terminado el mismo), con disfunción ventricular (disnea, edema pulmonar, edema dependiente, hepatomegalia, ascitis, derrame pleural), así como derrame pericárdico.
Sistema gastrointestinal e hígado: Mucositis (estomatitis y con menos frecuencia esofagitis) manifestada por dolor o sensación de ardor, eritema, erosiones y ulceraciones, hemorragia e infecciones. Puede ocurrir náuseas, vómito y en ocasiones diarrea y dolor abdominal, deshidratación e hiperpigmentación de la mucosa oral.
Sistema hematológico: Leucopenia dependiente de la dosis y reversible, neutropenia, trombocitopenia, anemia; mielosupresión con fiebre, infecciones, sepsis, septicemia, choque séptico, hemorragias, hipoxia tisular o deceso del paciente. Puede ocurrir leucemia mielógena aguda y secundaria, con o sin una fase preleucémica, la cual puede tener un periodo de latencia relativamente corto (uno a tres años).
Piel y anexos: Reacciones cutáneas y de hipersensibilidad: alopecia, interrupción del crecimiento de la barba por lo general reversible. También se presenta eritema, hiperpigmentación de la piel y las uñas, fotosensibilidad e hipersensibilidad de la piel radiada. En algunos casos ocurre urticaria y anafilaxia con exantema cutáneo y comezón o fiebre, escalofríos y estado de choque.
Reacciones locales: Son comunes las estrías eritematosas a lo largo de la vena en la que se aplicó la infusión, y esto puede preceder a una flebitis local o tromboflebitis. Puede presentarse flebosclerosis y, en caso de extravasación del fármaco, se presentarán dolor local, celulitis y necrosis del tejido.
Otras reacciones: Otras reacciones adversas incluyen malestar, cansancio e hiperuricemia, amenorrea y azoospermia en el líquido seminal. Se ha informado que la administración directa de epirubicina (o de regímenes que contengan epirubicina) y lipiodol dentro de la arteria hepática (embolización arterial a través de catéter) para el tratamiento local-regional del carcinoma hepatocelular primario (PHCC) o de metástasis hepáticas, produce úlceras gastroduodenales probablemente debidas al reflujo de los fármacos dentro de la arteria gástrica, y estenosis de las vías biliares consecutiva a colangitis esclerosante.
PRECAUCIONES Y RELACIÓN CON EFECTOS DE CARCINOGÉNESIS, MUTAGÉNESIS, TERATOGÉNESIS Y SOBRE LA FERTILIDAD: La epirubicina puede ser teratógena y embriotóxica, por lo que es necesario advertir a las mujeres sobre este riesgo y evitar el embarazo durante el tratamiento. Si se administrara este fármaco durante la gestación, o si una paciente se embarazara mientras está recibiendo este medicamento, se le informará sobre el riesgo potencial para el feto. La epirubicina, al igual que otras antraciclinas, puede ser teratógena y potencialmente carcinógena.
INTERACCIONES MEDICAMENTOSAS Y DE OTRO GÉNERO: El riesgo de toxicidad hepática puede aumentar con el uso concomitante de FAVICINMR y otros fármacos como acetaminofén, amiodarona, anabólicos esteroides, nandrolona, andrógenos, carmustina, cloroquina, dantrolene, disulfiram, divalproex, estrógenos, etretinato, hidroxicloroquina, metildopa, naltrexona, estrógenos, fenotiazinas, difenilhidantoína o ácido valproico.
Se pueden presentar trastornos sanguíneos con el empleo simultáneo de epirubicina y agentes farmacológicos como aciclovir, captopril, anticonvulsivos, antidiabéticos orales, enalapril, lisinopril, flecainida, imipenem, antiinflamatorios, analgésicos, maprotilina, penicilamina, pimozida, procainamida, prometazina, ramipril, sulfasalazina, tiopronin, tocainida, antidepresores tricíclicos o trimeprazina.
El uso de epirubicina con anfotericina B, antineoplásicos, azatioprina, cloranfenicol, colquicina, ciclofosfamida, flucitosina, ganciclovir, interferón o zidovudina puede aumentar el riesgo de infecciones.
La carbamazepina y las sales de oro junto con epirubicina pueden ocasionar trastornos sanguíneos e incrementar el riesgo de toxicidad hepática. Los agentes tiroideos, la mercaptopurina, el metotrexate y la plicamicina aumentan el riesgo de infecciones y de problemas hepáticos cuando se administran junto con epirubicina.
El uso concomitante de epirubicina y bepridil, diltiazem, flunarizina, isradipina, nicardipina, nifedipina, nimodipina o verapamilo puede contribuir a lesión e insuficiencia cardiaca. El uso concomitante de cimetidina aumenta la disponibilidad de la epirubicina en el organismo. Agentes como daunorubicina, doxorubicina, idarubicina, mitoxantrona y otras antraciclinas aumentan el riesgo de lesión cardiaca, leucemia secundaria y problemas gástricos y sanguíneos, así como el riesgo de problemas hepáticos cuando se utilizan con epirubicina.
En general, FAVICINMR es ampliamente metabolizado por el hígado. Los cambios en la función hepática inducidos por la farmacoterapia concomitante pueden afectar el metabolismo de la epirubicina, su farmacocinética, su eficacia terapéutica y su toxicidad.
ALTERACIONES DE PRUEBAS DE LABORATORIO: El tratamiento con FAVICINMR puede acompañarse de leucopenia y plaquetopenia. También pueden ocurrir alteraciones en los trazos electrocardiográficos e hiperuricemia.
PRECAUCIONES GENERALES: Se tendrá suma precaución en pacientes que hayan recibido tratamientos previos con antraciclinas en dosis acumulativas que rebasan las máximas. Es muy importante tener especial cautela cuando se trata con altas dosis de este antineoplásico a fin de evitar las posibles complicaciones clínicas que conlleva la mielosupresión, en particular la neutropenia intensa. En algunos de estos casos se ha requerido hospitalizar a los pacientes a consecuencia de complicaciones infecciosas graves.
Antes de iniciar el tratamiento con epirubicina se hará un reconocimiento clínico y de laboratorio del paciente para valorar su funcionamiento hematológico, cardiovascular y hepático. Se determinan hematimetrías completa y diferencial, así como valores de plaquetas antes y durante cada ciclo de tratamiento. La neutropenia y la leucopenia pueden ser graves, pero en la mayoría de los casos ceden hacia el día 21 de tratamiento.
La cardiotoxicidad es un riesgo reconocido de las antraciclinas y su forma más grave y típica es la miocardiopatía tardía, que es más factible de ocurrir cuando la dosis acumulada es superior a 0.9-1 g/m2 de superficie corporal. Se valorará la función cardiaca antes de comenzar el tratamiento con epirubicina y se seguirá evaluando durante el periodo de tratamiento para detectar cualquier riesgo y prevenir el daño cardiaco grave. Es conveniente obtener un electrocardiograma (ECG) y valorar la fracción de eyección del ventrículo izquierdo (FEVI). Los cambios en el electrocardiograma generalmente ponen en evidencia una toxicidad transitoria, pero una reducción del voltaje de los complejos QRS o una prolongación más allá de los límites normales del intervalo de tiempo sistólico pueden señalar una reducción en el FEVI, lo cual es típico de la cardiopatía inducida por antraciclinas.
En pacientes con otros factores de riesgo como enfermedad cardiovascular activa o latente, antecedentes de radioterapia previa en la región mediastínica y pericárdica, tratamiento previo con otras antraciclinas-antracenedionas o empleo concomitante de otros fármacos cardiotóxicos, la cardiotoxicidad de la epirubicina puede presentarse a dosis acumulativas bajas. En estos casos será más imperiosa la necesidad de vigilar el funcionamiento cardiaco.
La disfunción hepática o los trastornos biliares obstructivos pueden traer consigo un retardo en la eliminación del fármaco y un aumento de la toxicidad. De ahí la conveniencia de valorar el funcionamiento hepático mediante la determinación de enzimas hepáticas (bilirrubinas, AST, ALT y fosfatasa alcalina) antes de comenzar el tratamiento con epirubicina. En caso de disfunción hepática, se ajustará la dosificación tomando en cuenta los niveles séricos de bilirrubinas; en pacientes con valores de 1.2 a 3.0 mg/100 ml se reducirá 50% la dosis; a valores de 3.1 a 5.0 mg/100 ml se reducirá 75%.
La extravasación de la epirubicina durante la inyección intravenosa dará como resultado lesiones graves en los tejidos y necrosis. La inyección del fármaco dentro un pequeño vaso o las inyecciones repetidas dentro de la misma vena pueden ocasionar flebosclerosis. Se pondrán en práctica las medidas pertinentes para minimizar este riesgo de extravasación.
Al igual que con otros agentes citotóxicos la epirubicina puede ocasionar hiperuricemia como consecuencia de un intenso catabolismo de las purinas consecutivo a la rápida lisis de las células neoplásicas. Es conveniente verificar los niveles de ácido úrico en la sangre para reconocer y tratar oportunamente este problema.
DOSIS Y VÍAS DE ADMINISTRACIÓN:
Dosis: La dosificación por lo general se calcula con base en la superficie corporal del individuo (mg/m2). La dosis total de epirubicina que se administra por ciclo puede variar dentro de un régimen específico de tratamiento, lo cual dependerá de si se utiliza el fármaco como un agente individual o combinado con otros fármacos citotóxicos. Otro factor a considerar es la indicación terapéutica; en el tratamiento de los cánceres de mama y pulmón se emplean dosis más altas que las convencionales.
La administración intravenosa de epirubicina debe realizarse con precaución. Es recomendable administrar el medicamento a través de un catéter intravenoso de libre flujo (en una venoclisis que contenga cloruro de sodio isotónico o solución de glucosa a 5%) durante un lapso de unos 5 minutos, con objeto de minimizar el riesgo de trombosis o extravasación. No es recomendable la inyección directa dado el riesgo de extravasación.
Los protocolos para los regímenes pueden variar según cada institución. Cuando la epirubicina es utilizada como agente individual, la dosis recomendada por ciclo en adultos es de 60 a 90 mg/m2 de área de superficie corporal.
La dosis total por ciclo puede administrarse como una sola dosis o dividida en dos a tres días sucesivos. En condiciones de recuperación normal tras la toxicidad inducida por el agente quimioterapéutico, sobre todo la depresión de la médula ósea y la estomatitis, cada ciclo de tratamiento podría repetirse cada tres semanas.
En el tratamiento del cáncer de mama se ha ensayado una dosis mayor que 135 mg/m2 como un solo agente y 120 mg/m2 cuando se utiliza combinado.
Esta dosificación aplicada cada tres a cuatro semanas es eficaz y bien tolerada en el tratamiento del cáncer de mama. En el tratamiento coadyuvante de pacientes de edad avanzada con nódulos linfáticos positivos, se recomiendan dosis de 100 a 120 mg/m2 cada tres a cuatro semanas.
En pacientes que han recibido tratamiento intensivo previo, en enfermos de edad avanzada o en personas con infiltración neoplásica de la médula ósea, se recomienda dosis inferiores de 60 a 75 mg/m2 para programas de dosificación convencionales o de 105 a 120 mg/m2 para programas de dosis altas, o como alternativa, intervalos más prolongados entre los ciclos de tratamiento.
También se reducirá la dosificación por ciclo cuando se emplea la epirubicina en combinación con otros agentes citotóxicos con efectos tóxicos parecidos. Así mismo, es conveniente reducir la dosificación en pacientes con disfunción hepática, para evitar mayor toxicidad.
Vía de administración: La epirubicina es un agente antineoplásico citotóxico que suele administrarse por vía intravenosa. También se ha utilizado por vía intraarterial con objeto de producir una intensa actividad local y a la vez una toxicidad general reducida. Dado que esta técnica es riesgosa y puede ocasionar necrosis hística, la administración intraarterial sólo la llevarán a cabo médicos ampliamente capacitados en esta técnica.
FAVICINMR se administra mediante una venoclisis en solución salina de libre flujo, para minimizar el riesgo de extravasación y asegurase de que la vena se mantenga dilatada con la solución salina tras la administración del fármaco. La extravasación de la droga durante la inyección puede originar lesión grave de los tejidos, incluida la necrosis. La inyección del fármaco dentro de pequeños vasos o las inyecciones repetidas dentro de la misma vena pueden ocasionar flebosclerosis.
SOBREDOSIFICACIÓN O INGESTA ACCIDENTAL: MANIFESTACIONES Y MANEJO (ANTÍDOTOS): La sobredosificación de epirubicina puede producir degeneración miocárdica aguda dentro de las primeras 24 horas y mielosupresión grave en un término de 10 a 14 días. El tratamiento de la sobredosis consiste en medidas de apoyo que incluyen transfusiones sanguíneas. Se ha observado daños miocárdico tardío hasta los seis meses después de la sobredosis con antraciclinas. Se observará muy atentamente a los pacientes y si presentan signos de insuficiencia cardiaca, se aplicarán las medidas de tratamiento y apoyo pertinentes.
PRESENTACIONES:
Caja con frasco ámpula de 10 mg.
Caja con frasco ámpula de 50 mg.
RECOMENDACIONES PARA ALMACENAMIENTO: Consérvese en refrigeración de 2° a 8°C. No se congele.
Protéjase de la luz.
BIBLIOGRAFÍA:
• Martindale: The Extra Pharmacopoeia. 31th ed.
• Vademécum Farmacéutico IPE, 13a.ed. 2004.
LABORATORIOS CRYOPHARMA, S. A. de C. V.
Km. 22.5 Carretera Guadalajara-Morelia
45640 Tlajomulco de Zúñiga, Jal.
Oficinas en México: Calzada de los Leones 130
Colonia Alpes 01010 México, D.F.
Reg. Núm. 099M2006, IV SSA
DEAR06330021830006/R2006
LEYENDAS DE PROTECCIÓN:
Literatura exclusiva para médicos. Este medicamento es de empleo delicado. Su venta requiere receta médica. No se deje al alcance de los niños.
Este medicamento deberá ser administrado únicamente por médicos especialistas en oncología y con experiencia en quimioterapia antineoplásica.