COMPOSICIÓN

Cada CÁPSULA DE GELATINA BLANDA contiene: Vitamina E 1g, excipientes cs.

INDICACIONES: La vitamina E en altas dosis se encuentra indicada como elemento terapéutico de apoyo en las siguientes patologías:

1. Deficiencia de la vitamina E.

2. Mastopatía benigna fibroquística.

3. Enfermedad de Alzheimer.

4. Demencia senil.

5. Prevención de neoplasias en sujetos de alto riesgo.

6. En patologías con alta concentración de radicales libres como artritis reumatoide degenerativa del adulto, en fumadores, en intoxicación plúmbica.

7. Calambres nocturnos de extremidades.

8. Dermatitis fotosensibles.

CONTRAINDICACIONES

• Embarazo y lactancia.

• Se encuentra contraindicado en pacientes con insuficiencia renal severa, en pacientes con insuficiencia hepática severa.

• Se encuentra contraindicado en casos de hipervitaminosis.

• Se encuentra contraindicado en síndrome diarreico de etiología no aclarada.

REACCIONES ADVERSAS

Relativamente pocos efectos adversos se han observado en estudios en humanos con dosis de hasta 3.200 U.I. diarios. Entre los efectos reportados están tensión mamaria, leve fatiga muscular, aumento de la concentración de creatinina. Más raramente se han reportado tromboflebitis, hipertermia. No se han reportado cambios significativos en las enzimas hepáticas, ni en el cuadro hemático. En relación a seguimientos de larga data, en pacientes que son suplementados con vitamina E en dosis mayores a 1.000 U.I. por día, éstos presentan una mortalidad menor que los pacientes que no toman suplementos de vitamina E. No se han reportado casos fatales con estas dosis.

ADVERTENCIAS

Se ha reportado en algunos casos, aumento en el tiempo de sangría en pacientes que se encuentran recibiendo terapia anticoagulante. Se ha postulado que esto sería como resultado del bloqueo de la oxidación de la vitamina K a nivel hepático. La mayoría de los trabajos no lograron demostrar cambios en los parámetros de coagulación. Aun cuando la mayoría de los estudios no han demostrado cambios en el perfil lipídico de los pacientes, se pueden presentar leves incrementos de la concentración plasmática de colesterol total, sin significancia clínica. No así en las concentraciones del colesterol LDL, HDL y de los triglicéridos. En un trabajo se demostró una disminución de los niveles de las hormonas tiroideas, T3 y T4, aun cuando en otros estudios este hallazgo no ha sido nuevamente reportado.

PRECAUCIONES: Se recomienda un adecuado seguimiento de los pacientes que reciben altas dosis de vitamina E, con una anamnesis física periódica, con búsqueda dirigida de efectos secundarios.

Uso durante el embarazo: Producto de las altas dosis y de lo limitado de la experiencia, no se recomienda su uso en el embarazo. En el período de lactancia se recomienda no administrar.

DOSIFICACIÓN

La dosis recomendada es de 1.000 U.I. al día, en una toma diaria. La dosis puede ser ajustada de acuerdo a criterio médico. El tiempo de mantención de la terapia será de acuerdo al cuadro específico en que se indique. Estas dosis han demostrado ser seguras por períodos prolongados de tiempo.

DESCRIPCIÓN

Es importante hacer notar que sujetos con bajos niveles plasmáticos (medición indirecta de la concentración intracelular) de vitamina E presentan una clara asociación con diversas patologías de alta frecuencia de presentación como la enfermedad isquémica del corazón, la enfermedad de Alzheimer, ateroesclerosis, artritis degenerativa del adulto, envejecimiento prematuro, aumento en el riesgo de determinadas neoplasias. Existen sustancias que tienen la capacidad de anular la acción de los radicales libres, moléculas derivadas del oxígeno electrónicamente excitadas, como el anión superóxido, el hidrógeno peróxido, hidroxilo, hidroperóxidos entre otras, son los llamados antioxidantes celulares. Entre los antioxidantes celulares destacan los sistemas de glutation, superóxido dismutasas, GSH peroxidasas, GSH reductasa, GSH transferrasa, alfa tocoferol, ácido ascórbico, alfa y betacaroteno. Se debe señalar el rol terapéutico que presenta la vitamina E en las patologías anteriormente mencionadas, por el importante efecto protector sobre las grasas poliinsaturadas y los lípidos de las membranas. Usando la concentración de pentano en el aire expirado de la respiración como una medida de la peroxidación lipídica, estudios han demostrado que la ingesta diaria de 1.000 U.I. de vitamina E, disminuye en forma significativa la producción de pentano en sujetos sanos. La aplicación terapéutica de la vitamina E en altas dosis, permite importantes resultados clínicos, los cuales son avalados profusamente por la literatura científica mundial. Contundente evidencia científica bibliográfica ha demostrado que la vitamina E en altas dosis es capaz de lograr una estimulación del sistema inmune, mejorando la respuesta de las células CD4, CD8, aumentando la actividad bactericida de los leucocitos. Dosis diarias de 5 a 20 U.I. por kilo de peso (dosis total de 350 a 1.400 U.I. por día), logran un cambio en la producción de anticuerpos de IgM a IgG, este cambio como es sabido es indicativo del aumento de la actividad helper de los linfocitos. Lo anterior genera una mejor respuesta del individuo frente a las infecciones y permite un mejor reconocimiento de formas alteradas celulares o líneas celulares neoplásicas. De hecho, la suplementación de vitamina E en altas dosis, produce proliferación de linfocitos, aumento en la producción de interleucina 2 y aumento en los factores mitogénicos linfocitarios y factores de crecimiento locales. Recientes estudios han logrado demostrar en forma categórica que existe una estrecha asociación entre cáncer de pulmón, estómago, cavidad oral, colon y la cantidad de antioxidantes a nivel plasmático. Lesiones precursoras de neoplasias, leucoplasias orales, se han visto beneficiadas tanto desde el punto de vista clínico como del punto de vista histológico, por el uso de altas dosis de vitamina E, en forma sostenida en períodos de a lo menos 2 meses (400 U.I. a 800 U.I. dos veces por día) con una clara regresión de las lesiones. Diversos estudios han demostrado que después de 28 semanas de tratamiento con vitamina E en altas dosis, el carcinoma oral inducido por mutagénesis química, regresa en forma importante. En otra área se ha relacionado el estrés oxidativo con la patología diabética, en donde altas dosis de vitamina E mejoran de forma significativa la acción de la insulina tanto en sujetos sanos como en diabéticos no insulino dependientes. Como es sabido los radicales libres derivados del metabolismo del oxígeno a nivel celular, son capaces de alterar las membranas lipídicas, en donde la peroxidación lipídica produce cambios en la permeabilidad celular y puede llegar a producir la lisis de la célula. Este ha sido uno de los mecanismos postulados para explicar el envejecimiento celular. Los radicales libres derivados del oxígeno atacan monosacáridos y polímeros de carbohidratos, como también ácidos nucleicos, causando hidroxilación de las bases nitrogenadas, alteración en la replicación del RNA o alteración en las cadenas del DNA. Lo anterior lleva a un cambio en el ciclo de control celular, generando por tanto nuevas líneas celulares neoplásicas. El uso de vitamina E en sujetos de alto riesgo como fumadores, expuestos a radiación ambiental o compuestos con alto contenido de hidrocarburos aromáticos logra disminuir en forma importante el riesgo de hacer aparición de cáncer. En algunas poblaciones celulares, y organizaciones de tejidos en particular, el contenido lipídico de la unidad de membrana como de otras estructuras citosólicas, presenta una mayor concentración; éste es el caso del sistema nervioso central, en donde el daño resultante de la peroxidación lipídica produce en forma precoz alteraciones funcionales de importancia. Este es el mecanismo que ha sido involucrado en la génesis de enfermedades degenerativas cerebrales, como la discinesia tardía, demencia senil y la enfermedad de Alzheimer. Estudios multicéntricos con altas dosis de vitamina E (2.000 U.I./día), Deprenyl and Tocoferol Antioxidative Therapy of Parkinsonism (DATATOP), han demostrado que altas dosis generan una importante mejoría terapéutica, lo cual se explica por la potente actividad antioxidativa, fundamentalmente a nivel del componente lipídico de las membranas celulares. En los sujetos fumadores, existe un cambio en el status antioxidativo. El aumento en la peroxidación eritrocitaria está asociado clínicamente con una reducción de la actividad de la deshidrogenasa glucosa-6-fosfato, y una disminución de la actividad de la enzima en los fumadores puede contribuir a un aumento de la suceptibilidad al peróxido de hidrógeno. Es posible que los fumadores tengan un incremento en los requerimientos de antioxidantes, la vitamina E disminuye los cambios oxidativos en éstos. Desde hace bastante tiempo se ha usado altas dosis de vitamina E en el campo de la ginecología y reproducción, fundamentalmente en tres aplicaciones clínicas: el aborto recurrente de causa no precisada, la infertilidad primaria de factor masculino con astenoespermia, y la mastopatía fibroquística de la mama (fibrodisplasia benigna mamaria). De acuerdo a la evidencia anterior, la vitamina E tiene un claro efecto terapéutico como un potente antioxidante del componente lipídico de la unidad de membrana celular, lo cual serviría para tratamiento de apoyo o prevención en una serie de patologías.

PRESENTACIÓN

Envase con blister de 10 y 30 cápsulas blandas.

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